Esos rizos locos

28.8.06

Verano, vacaciones y agotamiento

Últimamente me propongo escribir centrándome en algún tema y no hay manera... tengo demasiadas cosas acumuladas por escribir. Así que me dispongo a poner la bitácora al día un poco a salto de mata, tal y como vengo haciendo en los últimos tiempos.
Bien, las vacaciones aún no han llegado, ya que yo, como "mis niños", me voy cuando terminan los exámenes de septiembre, es decir, el viernes día 1 partimos en ruta hacia el camino de Santiago. Empezaremos desde el principio (Roncesvalles) y llegaremos hasta donde lleguemos, si todo va bien, pensamos pasar aproximadamente 8 días caminando y ya llegaremos en otra/s tanda/s que hagamos cuando se pueda... De todos modos, no tenemos ninguna meta concreta ni ninguna prisa por llegar, así que intentaremos hacer unos 25 kms. por día pero si son menos, tampoco va a pasar nada, que tampoco hay necesidad de estresarse de vacaciones....
Así que cuando nos parezca bien, nos volveremos, haremos escala en Madrid y emprenderemos rumbo a la playita en busca de un merecido descanso. Que vamos... después de la caminata y del estupendo verano que nos hemos tirado trabajando, ya será hora de parar un poquín y coger fuerzas para emprender el curso con ánimo, que esto es un poco como el año nuevo y hay que empezar con nuevos propósitos, proyectos y metas...
Por el momento, estoy agotada. Este verano he tenido más clases que nunca: entre 7 y 10 horas todos los días. Eso a pesar de que ni tenía pensado coger tantas, ni quería... pero al final no sé decir que no y cuando me pide alguien conocido que coja a quien sea, mientras el día siga teniendo horas, al final termino cediendo. Esto se traduce con 800.000 horas más de las que yo quería, empezando a las 8.30 de la mañana sin parar hasta las 3.30, con media hora para comer, luego otras dos o tres horas más de clase y ¡en fin! cosas por el estilo, ya que estos que te piden que les cojas, casualmente siempre son los que tienen la costumbre de llamar los últimos, cuando tú ya habías configurado tu horario y habías cogido el máximo de horas que pensabas tener. ¡En fin! Esperemos que las vacaciones realicen su cometido y me permitan desconectar.